Las autoridades panameñas han comenzado las labores de derribo de las dos mansiones que posee el ex dictador Manuel Antonio Noriega tan sólo 24 horas después del anuncio del presidente Ricardo Martinelli sobre su intención de demoler las viviendas por razones de salud pública, ya que se encontraron criaderos de mosquito en las inmediaciones de estas viviendas, ubicadas en Altos del Golf, en el corregimiento de San Francisco.
Jaime Cohen, el subadministrador de la Autoridad de Aseo Urbano y Domiciliario, ha indicado que estas labores de derribo se mantendrán durante las dos próximas semanas, debido a que se deben remover los escombros y limpiar los terrenos.
El asunto del derribo de las mansiones del ex dictador y de su hija ya se encuentra en manos de los abogados. En este sentido, el abogado de Noriega, Julio Barro, ha confirmado que denunciarán la “ilegalidad” ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos. Por su parte, Thays Noriega, hija del ex dictador y residente en una de las dos mansiones derribadas, expresó su malestar con esta decisión en su propia cuenta oficial de Twitter. “Qué manera de deslucir los actos del 9 de enero con un exabrupto jurídico”, declaró.
La enfermedad del dengue, que ya mantiene hospitalizadas en Panamá a 27 personas, ha despertado todas las alertas. Por ello, el Gobierno de la República, a través el Ministerio de Salud (Minsa), recuerdan a los ciudadanos que deben seguir las indicaciones recomendadas, así como mantener sus hogares limpios.
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